Bioenergética: vive en un cuerpo vivo

Inicio  >  Info center  >  Métodos  >  Bioenergética: vive en un cuerpo vivo

¿Qué es el trabajo corporal bioenergético?

El trabajo corporal bioenergético es una aplicación moderna y práctica de los conocimientos terapéuticos de Wilhelm Reich (1898-1957) (estudiante de S. Freud) y fue desarrollado por los psiquiatras Alexander Lowen y John Pierrakos. Dirk Marivoet (° 1960) es alumno directo de John C. Pierrakos, MD, fundador de Bio-energética e Core-energética. Dirk ofreció ejercicios bioenergéticos a miles de personas.

Concepción fundamental

El trabajo corporal bioenergético parte de la concepción fundamental de la unidad entre cuerpo y mente. Somos “nuestro cuerpo”. Las tensiones y conflictos psicológicos, emocionales tienen un impacto en la tensión muscular de nuestro cuerpo desde la infancia. Algunas de estas tensiones comienzan a asentarse de forma crónica en lugares específicos como el cuello o la zona lumbar. Estos puntos tensos impiden una suave movilidad expresiva; causar una sensación corporal negativa e interrumpir el flujo de energía libre en nuestro cuerpo. Son como rocas que pueden transformar una corriente tranquila y en un evento turbulento, inquieto y caótico. Todo esto tiene un impacto negativo en nuestro estado de ánimo, vitalidad, autoconfianza, trabajo y ganas de vivir.

Los ejercicios bioenergéticos tienen por tanto como principal objetivo la limpieza de esos cantos rodados en nosotros mismos para que se vuelva a crear espacio para:

Un flujo de experiencia vibrante, enérgico y rico.

La tensión crónica bloquea las vibrantes ondas vibratorias que podemos sentir fluyendo a través de nuestro cuerpo. Se aseguran de que se repriman los sentimientos amenazantes como temblar de miedo, temblar de ira. Al mismo tiempo, se reducen las sensaciones corporales placenteras y excitantes como el placer reconfortante, el derretimiento en el amor, el hormigueo de alegría, el orgasmo fluido, etc.

Los ejercicios bioenergéticos estimulan estas sensaciones corporales vivas para que nos sintamos menos como estatuas.

Sentirse “de pie con los dos pies en el suelo”.

La tensión crónica y, como resultado, la reducción de la sensación de fluidez en los pies, tobillos, rodillas y piernas garantizan que las personas no se sientan firmes y plenamente en la realidad. Uno es rápidamente “desarraigado”, “desequilibrado”; es difícil “mantenerse firme”. Si uno no está “de pie con los dos pies en el suelo”, se inclina a “vivir con la cabeza en las nubes”.

En las clases de ejercicios de bioenergética, comenzamos a permitir el flujo sensorial en nuestras piernas para que aumente nuestra sensación de certeza, seguridad y conexión a tierra.

Respiración sin obstáculos.

Una buena respiración es esencial para una salud vibrante porque el oxígeno es el combustible para los procesos energéticos en nosotros mismos. Las reacciones emocionales como llorar, reír, gritar, asustarse, tienen una influencia palpable inmediata en nuestra respiración. Por lo tanto, no es sorprendente que mucha tensión muscular crónica esté fija en nuestros grupos de músculos que son responsables de una respiración total y sin obstrucciones.

En los ejercicios bioenergéticos hay por tanto una atención permanente para tomar conciencia de esta tensión y eliminarla.

Una mejor postura.

La tensión crónica influye directamente en nuestra postura. Las siguientes metáforas lo muestran bien: “La gente camina con la cabeza en el suelo”, vemos gente “sin columna vertebral”, gente que “saca el pecho”, algunos están “agobiados”, etc.

En el trabajo corporal bioenergético intentamos reestructurar nuestra posición corporal desequilibrada.

Una experiencia de sexualidad satisfactoria.

La energía sexual es una fuerza impulsora en nosotros mismos. Dado que la salud física y mental son completamente idénticas en el pensamiento bioenergético, una capacidad satisfactoria para el placer sexual influirá positivamente en nuestro funcionamiento físico, emocional y espiritual. Esta energía sexual, sin embargo, rápidamente dio y da lugar a material conflictivo que, como protección, crea una tensión muscular crónica alrededor y en la región pélvica. Esto impide entonces un flujo de energía orgásmica totalmente satisfactorio a través del cuerpo.

En el trabajo corporal bioenergético se presta mucha atención a desbloquear nuestra zona pélvica.

Una “expresión de sentimiento” espontánea y satisfactoria.

Si una persona no puede expresar sus sentimientos de manera satisfactoria, la vitalidad y la energía de su cuerpo disminuirán. En muchas situaciones uno se siente inhibido, bloqueado. Por otro lado, una expresión de sentimiento que es difícil de controlar también puede amenazar con inundar a alguien. La gente se siente apresurado, bajo presión.

En el trabajo corporal bioenergético, las personas tienen la oportunidad de familiarizarse nuevamente con un manejo satisfactorio de la expresión emocional en una situación controlada y protegida. Se hace un equilibrio entre un autocontrol satisfactorio y una expresividad adecuada.

Una sensación corporal más profunda.

La tensión crónica causa puntos muertos en nuestro cuerpo de los que ya no somos plenamente conscientes ni experimentamos. La gente empieza a retraerse cada vez más en su cabeza y es difícil liberarse del constante pensar, planificar, preocuparse… Muchas personas son muy poco conscientes de la riqueza de sentimientos y experiencias que ocurren en todo el cuerpo.

En nuestro trabajo bioenergético aprendemos a escuchar nuevamente el lenguaje de nuestro cuerpo. Hay una atención constante a lo que uno siente y experimenta dentro de sí mismo.

Epílogo

En nuestra opinión, el proceso bioenergético requiere un enfoque muy progresivo. Lo que ha crecido dentro de nosotros en tantos años no se puede desbloquear en uno, dos, tres. Inicialmente, nuestro trabajo bioenergético consiste en muchos ejercicios corporales activos con respiración, estiramiento, sacudidas, baile, etc. El cuerpo es, por así decirlo, amasado nuevamente en una sensación vibrante, relajada, completa. Solo de forma muy progresiva vamos a utilizar situaciones de movimiento y voz cada vez más expresivas, con suficiente espacio para el ritmo de crecimiento personal. En alternancia con el trabajo corporal bastante dinámico, también trabajamos con energía corporal más suave en masajes, relajación, vibración y meditación.

Las personas que han integrado el trabajo corporal bioenergético en sus vidas indican que esto tiene un efecto positivo en su vitalidad, estado de ánimo, nivel de energía y que pueden disfrutar más en sus diversas situaciones de la vida.

¿Te gustó este artículo? Compártelo en:

Sesiones de terapia individual

Dirk Marivoet psychotherapist in Belgium

Dirk Marivoet es un Psicoterapéuta Europeo Certificado (ECP). El se formó en fisioterapia(MSc) así como en terapia psicomotora en la Universidad de Leuven.Fué miembro del personal de psiquiatria durante 11 añoos en los centros psiquiátricos de la Universidad de Leuven. Con más de 35 años de experiencia el continua su aprendizaje de por vida en como integrar cuerpo, mente y espíritu. El reune su conocimiento clínico y científico de los campos de la psicoterápia, terápia psicomotora, fisioterápia, psicologia, psiquiatria y chamanismo.

Dirk Marivoet y sus colegas del IBI (Instituto Internacional para la Integración Bodymind) ofrecen sesiones de terapia individual para aquellos interesados ​​en este enfoque mente-cuerpo.

En Gante (Bélgica), Europa, el resto del mundo y online.

Mantente informado sobre próximos eventos

suscribiéndote a nuestro boletín infomativo